Nuevo CAP con recortes
A punto de finalizar la actual legislatura, desde la Junta autonómica se está preparando una nueva aplicación del Coeficiente de Admisibilidad de Pastos (“CAP”), que modifica sustancialmente las cuotas ganaderas y de pastos, sin contar en ningún momento con estudios pormenorizados que justifiquen la drástica reducción que sufrirá sobre todo la Provincia de León, muy por encima de la media autonómica.
Hasta tal punto es la diferencia que se llega hasta 40 puntos por debajo de la media en algunos casos, ni siquiera llegando a asomar la cabeza ni en la puntuación de los terrenos más favorables para el ganado y sus pastos.
Dicha reducción atentaría directamente, no solo contra la economía de cada municipio afectado, sino contra el aprovechamiento sostenible de los recursos naturales y la calidad medioambiental.
Y si se tiene en cuenta el peculiar clima de algunas comarcas, incluso se rompe el equilibro ambiental que sostiene flora y fauna para evitar desastres, ya sean naturales o provocados.
Si además sumamos la nueva regulación de caza que está en curso, permitiendo cada vez más zonas de caza sin regulación estricta. Se junta una mezcla explosiva que pone en peligro la vida rural y da paso a campos extensos para el disfrute de los "señoritos", con el consiguiente acotamiento cada vez más restrictivo de las zonas de pasto.
Y el tiempo apremia, ya que el coeficiente que resulte de los cálculos al azar de la Junta autonómica, será el resultado para las ayudas que vengan de Europa, que a todas luces, si los municipios afectados no ponen coto, se verán reducidos a la mínima expresión.
Ante esta nueva afrenta por parte del gobierno autonómico, desde Esllabón Lleonesista llamamos a los afectados a reclamar la derogación del nuevo CAP, y que sea adaptado a las necesidades reales de cada territorio, y no a los cálculos que se hacen desde despachos que nunca han olido ni el ganado ni los pastos.
Hasta tal punto es la diferencia que se llega hasta 40 puntos por debajo de la media en algunos casos, ni siquiera llegando a asomar la cabeza ni en la puntuación de los terrenos más favorables para el ganado y sus pastos.
Dicha reducción atentaría directamente, no solo contra la economía de cada municipio afectado, sino contra el aprovechamiento sostenible de los recursos naturales y la calidad medioambiental.
Y si se tiene en cuenta el peculiar clima de algunas comarcas, incluso se rompe el equilibro ambiental que sostiene flora y fauna para evitar desastres, ya sean naturales o provocados.
Si además sumamos la nueva regulación de caza que está en curso, permitiendo cada vez más zonas de caza sin regulación estricta. Se junta una mezcla explosiva que pone en peligro la vida rural y da paso a campos extensos para el disfrute de los "señoritos", con el consiguiente acotamiento cada vez más restrictivo de las zonas de pasto.
Y el tiempo apremia, ya que el coeficiente que resulte de los cálculos al azar de la Junta autonómica, será el resultado para las ayudas que vengan de Europa, que a todas luces, si los municipios afectados no ponen coto, se verán reducidos a la mínima expresión.
Ante esta nueva afrenta por parte del gobierno autonómico, desde Esllabón Lleonesista llamamos a los afectados a reclamar la derogación del nuevo CAP, y que sea adaptado a las necesidades reales de cada territorio, y no a los cálculos que se hacen desde despachos que nunca han olido ni el ganado ni los pastos.
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